lunes, 30 de septiembre de 2019

LA MÁSCARA DEL DIABLO; EL DISFRAZ QUE PERDURA A UNA TRADICIÓN.



La eterna lucha entre el bien y el mal se nos ha contado innumerables veces
mediante relatos cautivantes e inspiradores, pero pocas veces, estos son tan
memorables y vívidos como el de los Huizos de la colonia Ricardo Treviño, a
través su tradicional danza Atlixquense.
En ella se libra la épica batalla entre el Diablo y San Miguel Arcángel, cada uno
por su respectivo bando, sin embargo, el demonio no se encuentra solo, es
alentado por los Huizos, personajes travestidos que lo siguen y lo animan a
pelear, además de contar con su misterioso porte otorgado por la máscara que
lleva el personaje, la cual es capaz de infundir un profundo miedo a aquellos
que la miran fijamente a los ojos.
Aunque cada año el resultado de esta batalla es el mismo, existe otra cuyos
sucesos son variables en torno a lo que ocurre con la propia máscara, pues
entre las historias más populares se dice que aquel que la tiene en su
posesión, puede sufrir eventos paranormales como el movimiento de objetos
pequeños y terribles pesadillas que involucran a la máscara, y peor aún para el
portador de la misma, ya que deberá usarla durante 3 años seguidos para la
danza, por lo que podría tener mala suerte y recibir una noticia de la muerte de
algún conocido.
Existen medidas que ayudan a evitar todos estos sucesos misteriosos, como
guardar la máscara con un paño rojo y con mezcal, pero también hay otras
medidas que han sido útiles, como el ponerla contra la pared y taparla con una
manta, sin embargo, la medida más útil es siempre tener un gran valor y
respeto hacia lo que representa como tradición.

lunes, 23 de septiembre de 2019

Pipicha: el quelite prehispánico que perdura en el valle de Atlixco.


Considerada como un alimento para gente de bajos recursos, la pipicha es recolectada y consumida por los habitantes, quienes desconocen los datos nutricionales que aporta.
Por: Adrián E. Dolores







Chayito es una comerciante originaria de Huaquechula, vende frutas y verduras desde hace más de treinta años, en un pequeño puesto frente al mercado de la rotonda. Chayito cuenta que desde su niñez iba al cerro durante el temporal para buscar entre las piedras y los arbustos la pipicha, un quelite que vende a sus clientes y también lo ha consumido toda su vida, asegurándonos que se puede combinar con casi toda la comida y aporta un sabor característico que llena de sazón a sus guisados.

Recientes estudios hechos por la UNAM concluyen que la mayoría de este tipo de quelites posee grandes cantidades en fibra, hierro, calcio y vitaminas como B y C. En el caso de los alaches se han descubierto que combaten las baterías relacionadas con la gastritis, mientras que la pipicha tiene cualidades como antioxidante y desinflamatorio.

La pipicha o pipisa es poco valorada como alimento nutritivo, no obstante se ha consumido de manera cultural y tradicional desde antes de la conquista; diferentes registros de nuestra historia como el Códice Florentino, indican que ciertas culturas se alimentaban de ello cuando la agricultura poseía deficiencias para dar comida. Gracias a estos quelites ricos en nutrientes, permitió que muchas de estas culturas sobrevivieran ante estas problemáticas.

El sabor de esta hierba es menos intenso que el pápalo, cilantro, por lo general se puede comer en crudo acompañándola en cualquier comida, mientras que otros prefieren agregarla en una salsa o cocinarla con frijoles. Tu espíritu de estacionero para encontrar sabores únicos y saludables no puede pasar de largo para degustar la pipicha acompañada de una cecina atlixquense o un guacamole fresco.

martes, 17 de septiembre de 2019

Cuetlas

Cuetlas: Una delicia exótica del
temporal de lluvias en Atlixco.

Cuetlas, gusanos de árbol que aportan grandes nutrientes al cuerpo
humano; por su delicioso sabor, logra seducir paladares para
consumirlas en esta época de lluvias.
Por: Adrián E. Dolores



Durante las lluvias de temporal, podemos encontrar en los mercados de Atlixco las
cuetlas, gusanos que se alimentan de hojas y proliferan en los arboles del valle
como el “cualagua”. Estos insectos de color negro y manchas blancas se
consumen por propios y extraños, otorgando proteínas, hierro y aminoácidos
esenciales que son importantes para nuestro cuerpo.

A pasar de su apariencia extraña, los locales y visitantes acuden con los
comerciantes atlixquenses, para obtener una buena cantidad de cuetlas, su forma
de preparación consiste en exprimir el cuerpo del gusano para posteriormente
limpiar con agua y sal, por último se fríen con un toque de limón.

El sabor de las cuetlas es similar al de los chapulines y la forma más común de
comerlas es disfrutarla sobre una tortilla, mientras que otros paladares más finos
prefieren incluirlas en una salsa, del mismo modo que preparan las hormigas
chicatanas, otro manjar exquisito que es muy famoso durante el mes de junio en
los rincones de Atlixco.

Aquellos estacioneros que buscan disfrutar de sabores únicos y saludables,
podrán encontrar a nuestros comerciantes ofreciendo cuetlas en los mercados y
tianguis de Atlixco, una delicia que ha sobrevivido durante cientos de años que
tienes que probar durante tu visita en el lugar con el mejor clima del mundo.